Lo primero de todo dar las gracias a todos los protagonistas que nos ofrecen su tiempo, su paciencia, todos sus sentimientos e ilusión de un día tan especial.
Uno de los eventos importantes en la vida personal, pensamos que con el reportaje de boda debemos conseguir varios objetivos y no siempre fáciles.
Contar la historia de un día con fotos instantáneas y divertidas, que se van produciendo dependiendo del momento consiguiendo reflejar los estados de emoción.
Como profesionales de la imagen no queremos olvidar la técnica, la composición, la luz y el arte que se puede llegar a conseguir con una cámara que aunque siempre fría, sobre todo funciona gracias a los sentimientos y visión del portador de la misma.